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QUERÉTARO, Qro., 11 de enero de 2014.- Carlos Sánchez Centeno, estudiante de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Autónoma de Querétaro, trabaja en un proyecto de investigación relacionado con la elaboración de trompetas hechas con agave, así como en la composición de piezas musicales con este instrumento y su notación.
El proyecto académico del alumno de la Licenciatura en Música con línea terminal en Composición tiene varios aspectos: en primer lugar, consiste en encontrar, estudiar y clasificar los tipos de agave propicios para la construcción de las trompetas, con la finalidad de hallar timbres específicos para apoyar la música contemporánea; asimismo, desarrollar una escritura propia.
Explicó que pretende encontrar maneras más eficientes para fabricarlas, ya que existen varios constructores en el país con diferentes técnicas: una es tallar el interior la cosecha fecundada de la flor del agave (quiote); otra es el uso de la combustión para lograr el mismo propósito; y una más consiste en partir la planta por la mitad para volverla a unir. El método de Carlos Sánchez es cortar el agave y hacer una sola perforación con fuego para quemar el interior, con el fin de obtener un orificio sin dañar la cubierta externa del tallo.
Para clasificar las diversas especies de agaves recibe la ayuda del Dr. Luis Hernández, investigador de la Facultad de Ciencias Naturales (FCN) del Alma Máter queretana y especialista en agaváceas. El estado de Querétaro, por su clima semidesértico, cuenta con 80 de las 120 variedades que existen de esta planta, por lo que es una zona idónea para que se den el tipo de flores necesarias.
La importancia de realizar dicho estudio radica en la exploración de las propiedades, los efectos y las mediciones acústicas del instrumento para que pueda captar las vibraciones internas adecuadas para su funcionamiento. Además experimenta con técnicas de canto como la respiración circular y el uso de resonadores internos como el cráneo, los dientes, la tráquea, el pecho, el plexo solar y el diafragma para obtener nuevos sonidos.
Para ello, colabora con el Centro Nacional de Metrología (CENAM) y con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Querétaro para el acceso al acervo histórico y cultural del México prehispánico, con el objetivo de verificar si dicho instrumento musical fue empleado en la antigüedad.
“En los murales de Bonampak hay registros de que los mayas utilizaban trompetas de gran tamaño y que las cargaban en una posición muy aligerada, muy pegada a la boquilla; para levantar una trompeta de un metro 80 centímetros o de dos metros tuvo que haber sido muy liviana”, agregó.