Exhorta UAQ a no permitir vivir con miedo a los Queretanos
QUERÉTARO, Qro., 13 de diciembre de 2013.- Con una censura velada a la prensa, argumentando la protección del recinto legislativo, y en un proceso que se realizó en ‘fast track’, quedó atrás lo luchado y conseguido el 18 de marzo de 1938 por Lázaro Cárdenas al aprobar con 23 votos a favor de los diputados del PRI, PAN, Partido Verde y Nueva Alianza el dictamen enviado por la Cámara de Diputados para la aprobación de las modificaciones a los artículos constitucionales 25, 27 y 28, para la apertura a la inversión extranjera en materia energética.
Decenas de inconformes con pancartas en mano, intentaron detener la Sesión de Pleno para que hubiera una consulta popular, a lo que los diputados de la LVII Legislatura hicieron oídos sordos al escudarse en el supuesto de que estaban simplemente dando cumplimiento a un mandato constitucional, como lo expresó el presidente de la Mesa Directiva, Braulio Guerra Urbiola.
Ni aún con la solicitud expresa de algunos medios de comunicación se permitió el acceso a cámaras fotográficas o de video al interior del Salón de Pleno, sin ninguna razón justificable para tomar esa medida.
En diversas ocasiones los manifestantes inconformes, algunos vinculados con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y con la Unidad Cívica Felipe Carrillo Puerto, así como muchos ciudadanos que manifestaron no pertenecer a ningún movimiento social, quisieron que una comisión entrara a hablar con los diputados antes de que votaran algo tan importante para el país, pero los diputados se limitaron a solicitar la presencia de la fuerza pública para evitar algún desorden al interior del recinto legislativo.
Poco antes del mediodía, la comisión de Puntos Constitucionales, sesionó con la intención de discutir tres puntos que habían quedado en el tintero, pero por solicitud del secretario de la Comisión, Diego Foyo López, se preguntó a los integrantes de la Comisión si se bajaban del orden del día para subir el dictamen de reforma energética, a lo que los integrantes de la Comisión votaron sin hacer ninguna observación, ningún análisis, ni preguntar nada, simplemente, los cuatro priistas: Braulio Guerra Urbiola, Diego Foyo López, Gerardo Sánchez Vázquez y Juan Guevara Moreno levantaron la mano, el único que se opuso fue el presidente de la comisión, Marco Antonio León Hernández.
Durante la intervención en tribuna del diputado León Hernández, señaló que lo que se perderá de recursos para el país es más del doble de lo que costó el rescate bancario llamado FOBAPROA, lo que lamentó profundamente pues se trata de una de las acciones que más perjudicarán la economía de los mexicanos, al favorecer sólo a algunas manos nacionales y extranjeras con los recursos que deberían ser para el pueblo de México.
«Piensa al contrario del discurso y así acertarás, así vemos la reforma energética, cuando el gobernante de tres o dos colores afirma algo, la sociedad sabe que lo más probable es lo contrario, si las promesas de los gobernantes se cumplieran al menos en un 50 por ciento, en el país no habría desigualdad, ni pobreza, ni discriminación, la reforma energética es un ejercicio colonizador, se nos ofrecen espejotes a cambio de nuestro oro negro».
Durante su intervención, el diputado del Partido de la Revolución Democrática, Gerardo Ríos Ríos, reflexionó sobre varios puntos acerca de la aprobación de esta iniciativa para la modificación de los artículos 25, 27 y 28, al recordar que lo que Lázaro Cárdenas detectó, incluso antes de llegar a la presidencia durante su estancia en Villa Cuauhtémoc , Tamaulipas, como jefe de operaciones militares de la región, donde se pudo dar cuenta de las condiciones desfavorables en que tenían que laborar los trabajadores de las trasnacionales.
«Compañías extranjeras que llegaron al país en gran medida, alentadas por las facilidades que el presidente Díaz les había dado, a cambio de escasas retribuciones e impuestos y parcos beneficios a los trabajadores y a las comunidades en los que se enclavaban los campos petroleros».
Por su parte el presidente de la Mesa Directiva, Braulio Guerra Urbiola aseguró que lo único que hicieron fue cumplimentar un mandato constitucional, pues así está establecido que el Constituyente Permanente, es decir, los Congresos locales de los estados, emitan su opinión sobre si están de acuerdo o no con el dictamen, después de un análisis y discusión de las modificaciones que se pretenden, siempre en favor de la población mexicana, cosa que no se hizo, pues fue aprobada en un minuto en la comisión correspondiente.
«El procedimiento que ha dispuesto el Congreso de la Unión, nos ha notificado desde la madrugada para poder genera las condiciones que nos permitan respetar, desde el espacio de la locución de la tribuna pública, aquellos aspectos que son producto de las reformas estructurales energética, que han sido aprobadas por mayoría contundente por el Congreso de la Unión».
Finalmente ocupó la tribuna el coordinador de la bancada panista en el Congreso del estado, Guillermo Vega Guerrero, quién se limitó a dar cifras sobre el estatus de Pemex y aseguró que con estas reformas, los precios de los energéticos deberán bajar de precio y que se estarán viendo los primeros resultados en unos dos o tres años.